9.10.10

Cuando no te gusta lo que te cuentan en clase de Filosofía.

SÓCRATES.- (se pasea entre las estatuas pero no parece ver a nadie) Hola... ¿Hola? ¿Hay alguien por ahí? Pues vamos bien... ¿Hoy qué tocaban? ¿Holandeses? ¿Italianos? ¿Estudiantes? No me acuerdo... Y yo que me envenené para descansar tranquilo, hay que joderse. ¿Dónde decía lo de la ayuda extra a la comunidad en caso de autolisis? ¿En la letra pequeña del contrato de suicidio? No, claro, si ahora tendré que pedir perdón hasta por ser corto de vista. ¡Esto no va a quedar así! Voy a poner una queja al jefe supremo de la República. Y a afiliarme al Sindicato de Antiguos Bebedores de cicuta On the Rocks. O igual le lloro un poco a Peter, a ver si me adelanta la cita... ¿Que quién es Peter? Ah, bueno... Creo que por aquí abajo se le conoce como San Pedro. Sí, ese... Como tiene tanto tiempo libre, se metió a psicoterapeuta y, al paso que vamos, voy a ser su plan de jubilación. Fue enterarse del suicidio, y vamos: se frotaba las manos como un chiquillo con zapatos nuevos. Si ya me lo decía mi madre “Piénsate bien las cosas antes de hacerlas, chiquitín, no vayas a fastidiar más el asunto de lo que ya está”... Y así me ha ido. Yo creo que mi error fue no alimentarme bien: tener un grifo de Paulaner en el baño y ser un crack con la heladera de Famoplay no son datos de los que sentirse orgulloso. Pero... ¿es esa o no una buena forma de disfrutar la adolescencia? ¿Desde cuando es pecado vivir a tope intentando escapar de las canas y las putas arrugas? Todo para que después me acusen de corromper a los jóvenes... Eso jode, tío, eso jode. Ahora resulta que está mal contarles a una panda de niñatos que envejecer apesta, y que ser guapo y joven es lo que se lleva. De intransigentes está el mundo lleno... ¡Al paredón los mandaba yo a todos! ¡Mierda, meñique, veneno, joder! (hace tres respiraciones largas y profundas. Pausa) Un, dos, tres... Vale, ya paro: Peter me dijo que debía controlar mi rabia respirando profundamente... (Recitando, “de memorieta”) “El caballo desbocado piensa dos veces antes de salirse del camino de la rectitud”, “Hay que saber de dónde viene el aire para dirigir la barca”, “Revolver los cajones de la memoria tiene un precio demasiado alto... Y hace falta estar muy seguro para atreverse” Mhmm no, espera, esta última no me cuadra. Creo que la oí en “Los Soprano”. ¿O era en “La tribu de los Brady”? Total, da igual, en las dos estaban igual de pirados. Y es que hay familias en las que podrías grabar una teleserie completa con tan sólo acudir a sus celebraciones navideñas.

5 comentarios:

  1. Jaja, las clases de Filosofía ayudan a evadir la mente.

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  2. Voy a proponerle a mi profesor de filosofía que al menos deje que nos des una clase. Para mí realmente sería mucho más productiva! Me ha encantado! Saludos :)

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  3. Joder! Si las clases de filosofía fueran así, creo que no me aburriría tanto como hasta ahora lo hago. Pero a partir de ahora con lo que me cuenten, me montare mi propia batallita, y mataré dos pájaros de un tiro: Me enterare y encima no me aburriré.!
    Yeaaah!

    UN gusto, pasar!
    :)

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  4. amazing ; )) :**


    if you want, follow me <33

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Mi caja de cerillas no es muy grande... Pero seguro que puedo hacer un huequito para la tuya :)